¿Dijo Usted Postura?

En el artículo el Prof. Lic Mario E. Korell analiza el concepto de postura corporal tomando cómo eje diversas concepciones encontradas en la literatura, se incluye un comentario de cada una, justificando las razones por las cuales fueron seleccionadas. Al final se propone, en función de las definiciones analizadas, un constructo de Patrón Postural (PP) que sirva de referencia para los procesos de evaluación, diagnóstico y tratamiento.

Introducción

La Postura Humana es un constructo complejo, debido a las distintas connotaciones que tiene esta palabra.

Es frecuente dentro de la práctica profesional en Kinesiólogía que se requiera de la evaluación, de emitir un diagnóstico, o incluso una intervención terapéutica en relación con la postura, para lo cual debemos recurrir a una concepción sobre la misma que de sustento a dichos procedimientos.

En el artículo se analizan diversas definiciones sobre la postura encontradas en la literatura, se incluye un comentario de cada una, justificando las razones por las cuales fueron seleccionadas y el aporte que hacen con respecto a definir la postura.

Al final se propondrá, en función de las definiciones analizadas, un constructo de Patrón Postural (PP) que sirva de referencia para los procesos de evaluación, diagnóstico y tratamiento.

Desarrollo

Definición1

“Desde un punto de vista general, la postura, es el modo en que se dispone una persona, afectando a todo el sistema muscular y osteoarticular” [i].

Si bien es muy amplia y por ello inespecífica, esta definición nos permite establecer tres cosas. La primera es que la postura es una cuestión que se relaciona con el espacio que habitamos; la segunda, que es un fenómeno que involucra a la totalidad de un sistema, es decir que es un fenómeno global; y la tercera, que el sistema principalmente involucrado es el locomotor, aquí dividido en muscular y osteoarticular.

Definición 2

Biomecánicamente se entiende por postura a "la puesta en posición de una o varias articulaciones, mantenida durante un tiempo más o menos prolongado, por medios diversos, con la posibilidad de restablecer en el tiempo la actitud fisiológica más perfecta" [ii].

Aquí se agrega específicamente el término posición articular mantenida. Remite a la postura en cuanto a su concepción estática, considerada como una situación de equilibrio y que debe cumplir con una condición: la suma de los momentos de fuerza que están actuando sobre el sistema debe ser igual a cero (∑M=0).

El tipo de equilibrio que corresponde al cuerpo humano es el equilibrio inestable, debido a que el centro de masa corporal está por encima del punto en el que se apoya el sistema, ya sean los pies en bipedestación o monopedestación, o los isquiones en el caso de la sedestación. Recordemos que los otros dos tipos de equilibrio son el estable y el indiferente. Este último se logra cuando una persona se encuentra acostada sobre una superficie que la sostiene por completo.

Al hecho de que el equilibrio es inestable, por lo que se explicó anteriormente, se agrega que la base de sustentación es pequeña (más evidente en monopedestación), que se trata de un sistema poliarticulado y que está sometido constantemente a factores de desequilibrio, debido a que sobre él actúan fuerzas externas e internas.

Siendo las condiciones tan inestables y variables, para que se cumpla la condición de∑M=0 el control neuromotor debe reequilibrar el sistema permanentemente. Esto se logra gracias a un complejo circuito neuromuscular que censa constantemente la situación de estabilidad y reacciona ante el mínimo desequilibrio reajustando e incluso generando respuestas anticipatorias a situaciones de inestabilidad potenciales.

La definición expresa también la relación entre la postura y el mantenimiento de ella en el tiempo. El tiempo es un factor importante a tener en cuenta, por el efecto que este tiene sobre la fatiga tanto de los materiales como de los sistemas de control. Si bien el sistema neuromuscular encargado de regular y mantener la postura tiene características especiales, motivo por el cual se lo define como sistema tónico postural, igualmente es alcanzado en algún momento por la fatiga o el sobreuso.

Se hace referencia también a que se logra por medios diversos, es decir un sistema muscular, fascial o tejido conjuntivo y un sistema nervioso, los cuales podemos agrupar bajo el nombre de Sistemas Integrados de Coordinación Neuromuscular (SICONEM), tal como los denomina la Reeducación Postural Global [iii].

Por último, se refiere a la actitud fisiológica más perfecta. Este punto puede ser controversial debido a que no es simple definir cuál es dicha actitud. No debe confundirse la postura ideal considerada frecuentemente en los libros y que sirve como marco de referencia con la postura real que en definitiva logra organizar cada persona. Cuando se habla de la actitud fisiológica más perfecta se debería pensar en aquella que permite una mejor distribución de las cargas en las articulaciones y un menor gasto energético para lograr el control postural en las condiciones que sean necesarias.

Definición 3

"Se denomina postura a la posición del tronco relativa a la de los miembros, y ambos, como un todo en el espacio"[iv].

Esta definición es muy similar a la primera que vimos, en donde de manera muy general se relaciona a la postura con una cuestión que afecta a todo el sistema y que está dentro del ambiente que nos rodea.

Definición 4

El comité de postura de la academia de los EE.UU. de Cirugía y Ortopedia definió en 1947 las normas de postura como: "La alineación esquelética refinada como arreglo relativo de las partes del cuerpo en un estado de equilibrio que protege estructuras de soporte del cuerpo contra lesiones o deformidades progresivas" [v].

De esta definición podemos rescatar dos aspectos. El primero es el término equilibrio: la postura es la búsqueda constante del equilibrio. Ya nos hemos referido anteriormente a este aspecto. Por lo tanto, la postura no es una cuestión estática. Sí se presenta como un aspecto estático, pero es gracias a fenómenos de reequilibración constantes. El segundo aspecto fundamental es la condición de protección de deformidades. Esto también se relaciona con la postura ideal, ya que ésta permite dar mayor vida útil a nuestro sistema locomotor en la medida en la que evita la sobrecarga funcional y el prematuro desgaste, como ya lo mencionamos. Como contrapartida de esto, una alteración postural condiciona a quien la padece a trastornos degenerativos precoces a nivel articular y a la aparición de sintomatología diversa. Esto convierte al estudio y abordaje de la postura en una cuestión de prevención dentro de la salud de la población.

Al analizar estas definiciones podemos llegar a una primera conclusión. Cuando hablamos de postura debemos diferenciar:

1-El constructo postura corporal

2-El concepto de postura ideal

3-El concepto de postura real

1- Postura corporal

Es la capacidad de organizar los diferentes segmentos corporales en el espacio, permitiendo la estabilidad suficiente del sistema ante las demandas estáticas y dinámicas.

Se trata de reflejar que la postura no tiene razón de ser fuera de un propósito, y ese propósito bien puede ser mantener una posición o dar la estabilidad para organizar los movimientos. La postura es lo que subyace durante el movimiento, es el automatismo de fondo, la “plataforma” que permite toda la función dinámica.

2- Postura ideal

Es un estado de equilibrio que protege estructuras de soporte del cuerpo contra lesiones o deformidades progresivas, que favorece la coordinación motriz no constituyendo un freno o perturbación de la función dinámica y que se encuentra correctamente integrada al esquema corporal.

Podemos decir entonces que no es posible un movimiento eficiente sin una postura ideal.

3- Postura lograda

Es aquella que cada persona pudo organizar a lo largo su vida, dependiendo de los factores genéticos y del entorno. Puede o no estar en consonancia con la postura ideal.

La postura lograda está determinada por diferentes factores. Esto se ve reflejado en la interrelación que existe entre la estructura, la forma y la función, y aspectos psíquicos y somáticos, expresada por el esquema del hombre global descripto en el libro “El campo Cerrado” de Philippe Souchard. Aquí debemos también incluir el entorno, entendido como el ecosistema en el cual cada persona se desarrolla, incluyendo sus modos de vida y actividades.

En el esquema, la estructura tiene una posición central, por ser la base sobre la cual se organizan espacio-temporalmente el hombre y su postura [vi].

Esa estructura es la conjunción de dos aspectos inseparables e interrelacionados: la forma y la función. Para cada elemento constitutivo del ser humano, participan desde su concepción dos tipos de información, que darán las características propias que lo harán distintivo. Por un lado, está el componente genético, el cual proporciona la información básica y establece las bases sobre las cuales actuará el segundo componente, el epigenético o entorno, que condiciona el desarrollo y en última instancia modifica al anterior.

Existe evidencia suficiente para considerar que los factores epigenéticos regulan los aspectos de la morfogénesis (Lovetrup, 1974; Grüneberg, 1963; Slavkin y Greulich, 1975). Respecto al desarrollo humano en general, parece que cada estadio del desarrollo desde la primera división del huevo fecundado establece su propio entorno, tanto metabólico como mecánico, que luego regula cada etapa de la morfogénesis a modo de una cascada (Blechschmidt, 1974) [vii].

De esta manera, a medida que el individuo crece y se desarrolla, a partir de su estructura dada genéticamente se va moldeando la forma de los elementos esqueléticos a través de la función.

De ahí la relación íntima entre los tres elementos: estructura, función y forma.

-Cuando la estructura es la adecuada, la función puede ser correcta.

-Cuando la estructura está alterada, la función no será eficiente aunque puede ser efectiva.

-Cuando la estructura es la adecuada y la función correcta, la función protege a la morfología.

-Cuando la estructura es la adecuada y la función no lo es, la morfología sufre deterioro prematuro.

La Postura no es una función innata, es algo que se construye conjuntamente con el desarrollo y el aprendizaje motor. Según las teorías de control y aprendizaje motor, se considera al aprendizaje motor como emergiendo de una interacción entre el individuo, el ambiente y la tarea u objetivo a aprender. De esta manera, los procesos relacionados con el aprendizaje motor constituyen una búsqueda de soluciones a problemas específicos del individuo frente al ambiente" [viii]. Esta búsqueda de soluciones se estructura sobre la base de la organización postural. De esta manera, volvemos a encontrar una interacción entre lo funcional y lo estructural, en donde incluso la influencia social y el ambiente tienen un peso considerable.

El hallazgo en la literatura de diversas definiciones y puntos de vista muestra la dificultad de resumir tan compleja función en una sola idea. Es así como vemos que cada una de las definiciones aquí presentadas enfatizan sobre distintos aspectos.

Queda un largo y necesario camino de debate para que aquellos que nos encontramos en el área de la Reeducación Postural logremos unificar criterios, cosa imprescindible para mantener un lenguaje común que permita la transmisión de ideas, conocimientos y resultados terapéuticos.

El deseo es que este material sirva como estímulo a la reflexión y a la búsqueda de ese lenguaje común, y no quese interprete como la pretensión de sumar una nueva definición a las ya existentes.


[i]Jouvencel M. R. Ergonomía Básica, pag. 59, Diaz de Santoz S. A., Madrid; 1994
[ii]Vayer, Pierre, El dialogo corporal, pag. 203, Editorial Cientifico-Médica, Barcelona; 1972
[iii]Souchard P. Deformaciones morfológicas de la columna vrertebral. (Pag. 6) Elsevier; 2016
[iv]Cardinali, Daniel, Manual de Neurofisiología. 5° Edición 1993
[v]Caillet, R., Incapcidad y dolor de tejidos blandos. Según cita. pag. 12
[vi]Souchard P.; El Campo Cerrado. Le pouse; 1981
[vii]Moss, M. L.; en “Fundamentos Científicos de Ortopedia y Traumatología” Owen R., Goodfellow J, Bullough P.. Salvat 1984. Capítulo 9 (Pag. 67)
[viii]Martín Carrillo, "El aprendizaje motor en la práctica clínica: nuevos paradigmas en la rehabilitación de individuos con lesiones del sistema nervioso central". Kinesiología Nº 76, junio 2005. (citado de Newell KM, Motor Skill acquisition. Ann Rev Psychol 1991; 42:213-237)